El fin de año en Madeira es uno de los más conocidos y visitados de toda Europa y del mundo. Nosotros solemos ir cada dos años ya que los precios de los billetes suelen ser elevados y siempre nos supone hacer conexiones inimaginables y horas perdidas en los aeropuertos con la finalidad de ahorrarnos unos cuantos euros.
Este año nos plantamos en el aeropuerto de Barcelona el día
26 bien pronto por la mañana y no llegamos a Madeira hasta media tarde,
haciendo una escala improvisada de 5 horas en el aeropuerto de Gran Canaria. La
vuelta fue más divertida aun, ya que la escala era de 8 horas y finalmente nos
decidimos a salir del aeropuerto y dirigirnos a la playa de Melenara, que por
cierto fue un acierto y estamos seguros de que repetiremos la experiencia si hacemos
escala en Gran Canaria de nuevo! El ambiente y la temperatura es genial :-)
Pasar el fin de año es un planazo. Como os comentamos en el
post de Navidad en Madeira, Funchal está muy iluminada y decorada, y podéis
aprovechar para visitarla los días previos a fin de año.
El día 31 por la noche la gente sale a la calle después de
cenar y se preparan para los fuegos artificiales, los cuales suelen durar una
media de 10 minutos. Y aunque os parezca muy poco os aseguramos que es una
explosión de color impresionante! Justo cuando tocan las 12 los cruceros
atracados en el puerto dan la señal para empezar la fiesta, señal que avisa que
ya podemos empezar con nuestras 12 pasas (Nada de 12 uvas como en España!).
Es
impresionante ver toda la bahía llena de fuegos artificiales que explotan todos
al mismo tiempo. Lo mejor de todo es que tienes toda la bahía para poder
verlos, ya que no están en un punto específico sino que resiguen toda la costa
sur. Cualquier punto de Funchal o alrededores será bueno para que los podáis
ver, pero si tenéis dudas podéis preguntar en el hotel y seguro que os dan
indicaciones!