Entrada a la Ópera de Viena por...3€?


Fuimos a Viena con la idea fija de visitar la Ópera. Habíamos leído que había la posibilidad de pagar 3-4€ y acceder al interior del edificio y asistir a una ópera desde unas zonas habilitadas en las que los asistentes están de pie. Así que cuando llegamos a Viena empezamos a planear todo aquello que queríamos visitar (incluso una visita fugaz a Bratislava, capital del país vecino de Eslovaquia).




Para visitar la Ópera pagando estos 3-4€ hay que hacer cola dos horas antes de que empiece en el lateral izquierdo del edificio. Está perfectamente indicado y además, el mismo día que os dispongáis a ver la cola…la veréis. La cola es larga y muchísimas veces quisimos desistir. Cada 45 minutos aprox. la cola se mueve y cambia de lugar: primero se empieza en la calle y después dejan ya acceder al edificio; más tarde se avanza a otra sala de espera hasta que unos 15 minutos antes de que empiece la ópera empiezan a vender las entradas. Existen tres zonas, que para quien sepa alemán sabrá donde están situadas. El resto de los mortales es…suerte. Las que cuestan 4€ son para la zona de platea y las de 3€ para el palco (hay dos zonas en el palco, una a mitad y la otra en el último piso superior). 

Recordamos que no hay asientos sino que pasaréis todo el espectáculo de pie. Además no es posible guardar abrigos, ni chaquetas, ni bolsos con vosotros. Os obligaran a dejarlos en el guardarropa (gratis). Lo único que podemos tener con nosotros son las cámaras de fotos. Nosotros vimos “Elektra” y aguantamos hasta lo que calculamos fue la mitad de la ópera.

El interior del edificio es lo que realmente vale la pena, la oportunidad de acceder a la ópera por ese módico precio es algo sorprendente. Una gran apuesta por la cultura!